El nombre de Funiculí viene del concepto de acción funicular, de subir y bajar. Este sencillo mecanismo de sube y baja se consigue mediante una doble pinza que permite cambiar la altura de la pantalla para adaptarse a las necesidades del usuario. La pantalla ofrece una rotación de 360º para dirigir el haz de luz hacia donde convenga.
La base de la Funiculí tiene una goma que recubre el contorno, evita el contacto frío del metal con el suelo y añade estabilidad a la lámpara.
Base y fuste en hierro lacado. Pantalla en aluminio lacado. Goma negra que envuelve el contorno de la base.